El Ayuntamiento de Salamanca ha presentado dos de medidas para mejorar el servicio su sistema de bicicleta pública, SALenBICI. La primera de ellas es la creación una nueva página web que, a diferencia de la anterior, permite realizar una pre-inscripción por internet (La Gaceta). La segunda es una aplicación para que a través del móvil el usuario pueda consultar sus datos, informar de una incidencia o incluso realizar un préstamo, sin necesidad de recurrir a la tarjeta o el sms (El Norte de Castilla). Para explicar estas nuevas medidas y fomentar el uso del sistema, el Ayuntamiento llevará a cabo una campaña informativa en la que se repartirán trípiticos (Salamanca24horas). En anteriores ocasiones, he criticado que se deje morir un sistema sin intentar mejorarlo, pues bien ahora me toca alabar al Ayuntamiento de Salamanca por hacer esfuerzos ofreciendo nuevas alternativas.
Menos contento me dejan las declaraciones de su concejal de Medio Ambiente que afirmó lo siguiente: el 56% de los préstamos dura menos de 15 minutos, lo que demuestra que la finalidad del servicio, que era fomentar la movilidad sostenible, se está cumpliendo (vídeo de CyLtv en La Gaceta). Está muy bien que se haga alusión al objetivo del sistema, esa vieja reivindicación mía, pero nada tiene que ver la duración del préstamo con la movilidad sostenible. «Fomentar la movilidad sostenible» es un objetivo algo general. Intetemos ser más concretos. Si lo que se quería decir es que el objetivo del sistema era reducir el uso del coche, ¿dónde están las encuestas que muestran el porcentaje de usuarios que ha dejado el coche gracias a la bicicleta pública? Si el objetivo era aumentar el uso de la bicicleta, ¿dónde están ese estudio pormenorizado? Si el objetivo era promocionar el uso del tranporte público, ¿dónde está ese porcentaje de usuarios que combina la bicicleta pública con el transporte público? Las buenas intenciones ya están, ahora falta ser más rigurosos. Lo he dicho otras veces, ser transparente es la mejor publicidad.